Titulo original en la version francesa Un chien des mes chiennes
¿Cuánto tiempo hace ya que Canela nos da tanta alegría compartiendo nuestras vidas? Casi catorce años. Si se tiene en cuenta el cuadrúpedo este con el pelo largo tenía dos buenos años cuando lo sacamos del abominable refugio donde se estaba muriendo de aburrimiento y de falta de cariño, es una verdadera viejecita que sigue siendo nuestra felicidad.
Gigi llegó mucho más tarde. Esta bóxer de raza pura, insoportable en su juventud, que desenterraba nuestros cactus y tenía la mala costumbre de cortar las hojas de las aloes vera para masticarlas, fue castigado muchas veces hasta convertirse en una buena y adorable jugadora .Con una infinita ternura hacia los muchos hijos de amigos que a menudo vienen a nosotros.
¿Por que nuestra tercera perra se llama Blu? Mira sus ojos de un azul claro que contrasten con el chorro negro de su chaqueta, y entenderás. Una amiga trágicamente desaparecida fue muy contenta de quela hemos recogida en nuestro modesto hogar, ya que no se lleva bien con una cosa pequeña con patas llamada Chihuahua enano. Tal encantadora Blu que nunca mostró ningún signo de agresión hacia cualquier persona
Alrededor de nuestro nido de amor familiar, por suerte la tierra es grande. Las tres perras, tres gatas, una esposa, una hija adolescente a comer con besito y cruda…todo esto al cual se viene añadir frecuentemente mi madrastra (más habladora que las urracas de los pinos que nos rodean), la tía abuela, las primas atraídas por la piscina en verano y las amiguitas del cole de la niña ... ..
¡Ayuda! A veces me siento un poco solo!
Cuando hay buen tiempo, en un buen paseo, casi a diario, marcho con los tres inseparables. Empinadas colinas y pequeños bosques que nos rodean no tienen más secretos para nosotros. Muchas piedras que marcan sus caminos nos saludan por nuestros nombres a cada uno de nuestros pasos y los vientos repentinos sí mismos parecen debilitar cuando abrimos suelo por espacios sin arbole. Por menos nos molestar. Si bien acompañado por tres bestias feroces, no temo una agresión. Además, yo nunca he pensado que podría alguna vez suceder ... Sin embargo;;;
Cuando llegue el momento para eso, a las cinco o las seis de la tarde, las colas retorciéndose ansiosas, los ojos suplicantes en la terraza, en frente de la puerta ventana de cristal, cuatro animalitos esperan. Vivimos a mas de tres kilómetros del pueblo, una calle tranquila de la urbanización bordea nuestra casa. El muro ve pasar muy pocos coches. Excepto por los fines de semanas, cuando nuestros vecinos vienen, escapándose de la contaminación de Barcelona o de sus alrededores.
Una vez entreabierta puerta, mis tres compañeras apresuran mi vara larga dando órdenes (que a veces finge golpear, pero nunca cae) . Una corta subida de la calle y por el camino antes de empezar una y mil vueltas de terrenos construidos como de tierras agrícolas donde olivos y algarrobos abunden, nos vamos en las altas colinas que volvieron a verdear después del devastador incendio de 1980 y poco. Elijo nuestro camino según mi estado de ánimo, a veces mi condición física.
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Ese día, como de costumbre, la negra Blu se fue como una flecha. La caliente sangre de cuidadora de ovejas en sus venas, empiece a rodear una manada imaginaria antes de volver al pastor. Incansablemente. Mientras que los otros tres caminantes tragan cuatro o cinco kilómetros, los ojos azules pasean por lo menos tres veces esta distancia. Mi esposa asumió que la Blu es el resultado de las nupcias entre un ventilador y una flecha.
Tal cohete se tiro en dirección equivocada, rumbo hacia abajo. Yo vi un poco más lejos un joven que se detenía y se dándose la vuelta, desapareció en una calle lateral. Indiferente, la Blu siguió su trayectoria. El drama comienza……
Cuando me acerco al joven que estaba con su padre, suavemente lo saludo y empiezo a hablar intentando de tranquilizarlo..
-No tenga miedo, esta perra es muy agradable y nunca te hará ningún daño. Pero evita correr adelante cualquier animal, se puede excitar y volverse agresivo.
Unas palabras que hasta once o doce años, se pueden entender... no a la edad del padre!
-No! Pero no voy a permitirte ! Los perros deben ir con correa en la urbanización. ¿Y quién eres tú para dar consejos a mi hijo mientras tu maldito animal casi se lo come!
En España, el tuteado es muy usado, pero en todos los países, la mala fe y la mentira grosera me repugna.
"Pero en fin, vi todo. Mi perro ni siquiera se ha acercado a tu hijo!
Mi antagonista estaba retorcido. Leí el odio en sus ojos, el incidente era solo una excusa para su manifestación.
-Además, tu me llamas mentiroso. Hijo de puta! Te voy a matar!
El hombre cavaba una zanja para el paso de una tubería de agua, cerca de la casa de su padre y éste ultimo aunque presente no dijo una palabra. En cinco segundos tuvo un chico frente a mí, gritando y escupiéndome baba encima de mi cabeza. No me moví ni de una pulgada, pero digo dos palabras, demasiado.
-¡Estás loco!
Los reflejos de mis largos tiempos de comando en el glorioso ejército francés me hacen evitar la muerte. Pero al instante unas alas me empujan. De haber dejado el tabaco a largo detrás de mí, yo sembré mi agresor sin dificultad. En cualquier caso, cuarenta años antes, lo habría hacer comer el mango del pico y el hierro por el mismo precio. Con mis sesenta y seis años cumplidos, mis setenta kilos empapado, frente a un hombre de treinta de edad y pesando casi un quintal... entenderán todos el por qué de mi escapada frente a la locura.
"Voy a esperar fuera de tu casa, pendejo, yo sé dónde vives. Te voy a matar.
No hay casos de conciencia. ¿Cómo no convertirse en un delator antes de un tal individuo? El teléfono movil no fue inventado por nada. Ayuda me 112!
Más de veinte minutos de espera antes de ver un coche con luces azules parpadeando. Fuera de la vista de mi atacante, los señores en uniforme, muy educadamente me piden que diga a los hechos. Yo fácilmente reconoció que mis perras ahora se escaparon y erran ahora en la naturaleza, no se llevaron a cabo con una correa. Pero más allá, de ser asaltado de tal manera ...
Dejándome, estos señores van a escuchar cualquier queja. Una historia toda diferente. . La de una bestia salvaje que atacó a un niño que tuvo el tiempo justo para encontrar refugio cerca de su padre. El propietario de la bestia abominable, un extranjero además, se ha permitido sermonear verbalmente a la pobre criatura asustada. Las amenazas de muerte? Con un pico perseguir este Frances? No, no señor policía, esto es una mentira. El culpable es el dueño de las bestias. Es un irresponsable que la ley debe castigar.
Tengo en mi cartera dos activos. El primero es que el líder de la patrulla no me es totalmente desconocido. Yo lo vi en su trabajo hace dos años en una lucha contra los top-mantas, estos vendedores que invaden regularmente nuestras playas y mercados nocturnos. Ahora estoy trabajando en uno de ellos. Mi segunda tarjeta es mi sinceridad que el oficial va adivinar el bluf que vamos a montar juntos. Sugiero que tomé fotos de la tipo de cubierta con mi teléfono portátil. Palo a lo alto cuando me perseguía.
Después de una hora de paciencias y palabrerías, el tonto que quería mi muerte no va a quejarse de mis perros, no va a denunciarme. Ufff, evito una multa que podría subir hasta 1.500 euros ... por animal! Hago mi mea culpa y los polis me reconducen a casa, a ver a mis tres peligrosas compañeras de cuatro patas, esperando tranquilas adelante la puerta. Uno de ellos es también es dueño de un boxer. Una corta charla establece cierta simpatía antes de que el trío se vaya para abordar otros problemas.
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A partir de este día, es en la parte trasera de la furgoneta que empecen nuestros paseos diarias. Nos llevamos bajo un cielo menos peligroso donde los excursionistas y ciclistas envíen sus perritos con ellos sin el menor problema Pero también ocurre que me voy caminando solo en la urbanización... cerca de la casa de un loco. Mas bien cuando este último está en el trabajo. Un mastín, tan encantador que su amo, ladra defendiendo vigorosamente su terreno. Un grande perro, especie clasificada como peligrosa, que sin un bozal podría reemplazar ventajosamente los leones de un circo romano.
He decidido hacerme amigo, muy amigo con el...
Cada día se me ocurrió venir con una buena costilla de buey, apenas pasada por la parrilla y goteando de una buena salsa. Mezcla de sangre, aceite (de oliva, por favor), de especias de barbacoa y un poco de agua. Una pizca de sal ... .hummmmmm!
Antes de cada pieza, un corto grito.
-COMER
El valiente perro me chupó rápidamente los dedos a través de una valla demasiado oxidada en los bajos. Esta misma valla que poco a poco he torcido y roto hacia el exterior. Hasta que el agradable (Atila por tal era su nombre) me sigue bozal aceptado sin problema…
En mi sótano, por una semana el "COMER", continuó.
El dueño del mastodonte, bruta desesperada, ha pegado unos cuentos carteles en la urbanización y en el pueblo. Número de teléfono, la foto del perro y la recompensa.
Entonces, una noche, alrededor de las diez, cuando la luz ya permite confundir perros por lobos, teniendo Atila en una corta correa con un gancho de seguridad, sonó una mano enguantada en la puerta del loco. El intercomunicador prudente me preguntó:
Sí? Quién es?
-Ya tengo a su perro señor!
-Siiii! Fantástico! Ya voy!
La puerta abierta el tipo me reconoció.
Pero, ¿eres tu?
Por supuesto cretino! Un gran chorro de salsa con sangre de buey, con aceite (de oliva, por favor) un poco de sal, y especias barbacoa, deliciosamente proyectado en su entrepiernas. Facilísimo visto el liviano pijama del tipo.
- COMER!.................
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El oficial de policía se convirtió en un amigo, más de una vez durante nuestra conversación el tema se discutió de nuevo, y termino entonces por desaparecer en el olvido ... No del todo. De vez en cuando surge un recordatorio.
-Dime Gabriel, patear al perro, que verdaderamente era para nada?
El único testigo fue sacrificado, el tonto bestial de su dueño había tapado el agujero de la fuga a través de la valla. En cuanto a mi sótano, un día después de la tragedia, lo he desinfectado con fuerza lejía y luego;;; cimentado a profusión. Dos días más tarde y todavía sin un que un investigador hizo visita, se colocaron las baldosas.
"Pero finalmente amigo poli, no me crees capase de hacer eso? No crees eso de mí?
No sé, no sé ...
Atención, amigo desde poco, pero siempre policía!
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